Estrategias que transforman su empresa, aumentan los ingresos, productividad, compromiso y deleitan a los clientes.
Transforma tu liderazgo y desarrolla una cultura de mejora continua en tu organización con principios Lean.
En muchas organizaciones, es común que la primera opinión en una reunión provenga del líder. En algunos casos, esa opinión se convierte rápidamente en una instrucción directa de lo que se debe hacer. He escuchado con frecuencia que este enfoque desmotiva a los gerentes, afectando la moral de los equipos. No obstante, cada empresa es única y no todas las dinámicas son iguales.
Los líderes Lean enfrentan el desafío de renunciar al control y empoderar a sus equipos para que tomen decisiones informadas y efectivas. Hace tiempo leí sobre un CEO que afirmaba que el verdadero trabajo de un líder es colocar a las personas en posiciones desafiantes, donde deban esforzarse para tener éxito. Este enfoque no solo fomenta el crecimiento profesional, sino que también impulsa la mejora continua.
El liderazgo Lean como motor de la mejora continua
Los líderes Lean adoptan esta filosofía para desarrollar una cultura de mejora constante en sus organizaciones. Sin embargo, no siempre es fácil. A menudo, escucho a líderes decir: «El CEO dijo que hagas esto», lo que puede crear una obediencia automática sin reflexión crítica. Cuando yo mismo estuve en esa posición, me di cuenta de que, a veces, los empleados seguían mis instrucciones simplemente porque era el jefe, sin cuestionar el porqué.
La verdadera clave de un liderazgo Lean efectivo es averiguar cómo influir en los equipos sin usar el poder jerárquico. Esto se logra a través del ejemplo, el coaching y la creación de un entorno en el que los empleados se sientan empoderados para tomar decisiones y resolver problemas de manera autónoma.
Principios clave para un liderazgo Lean efectivo
Para liderar con eficacia bajo los principios Lean, es fundamental enfocarse en lo siguiente:
Coaching y Mentoría:
Dedica tiempo a desarrollar las habilidades de tu equipo. Ayúdales a encontrar sus propias soluciones, en lugar de darles respuestas inmediatas. Esto no solo fomenta el pensamiento crítico, sino que también les da confianza en sus capacidades.
Visita el Gemba:
Mantén una presencia constante en el lugar donde se crea el valor. Al estar en el terreno, puedes entender mejor los desafíos que enfrentan tus empleados y colaborar con ellos para superarlos.
Promueve la Autonomía:
Fomenta un ambiente donde los empleados se sientan seguros para tomar decisiones. Esto no significa dejarles solos; significa crear una cultura de confianza y responsabilidad compartida.
Reflexiona y Ajusta:
Utiliza el ciclo PDCA (Plan-Do-Check-Act) para evaluar continuamente tus estrategias de liderazgo. Ajusta tu enfoque según los resultados y el feedback que recibas.
Conclusión:
Un líder Lean alinea el propósito, con el procesos y las personas.
Implementar estos principios no solo ayuda a construir una cultura de mejora continua, sino que también desarrolla equipos auto-suficientes y altamente eficientes. Lean no es solo un conjunto de herramientas, es una forma de pensar, un sistema en el que el propósito, los procesos y las personas están alineados para alcanzar el éxito.
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